martes, 23 de noviembre de 2010

ESTRATEGIAS PARA LA COMPRENSIÓN DE LECTURA

Algunas estrategias cognoscitivas para facilitar la comprensión textual

A continuación presentaremos algunos elementos teóricos para la comprensión lectora, esencialmente ciertos criterios y estrategias básicas que facilitan la reconstrucción del significado global y específico de un texto. No es nuestro propósito realizar una presentación exhaustiva, sino más bien señalar algunas estrategias modelo.
El primer principio que es necesario tener en cuenta para desarrollar la comprensión lectora es no fragmentar el texto ni el proceso lector para no caer en la ilusión de que al desarrollar destrezas aisladas en el lector, éste las integra en su proceso de lectura.

Las destrezas necesarias para desarrollar la comprensión lectora deben promoverse en el mismo proceso de lectura. Pero también es necesario implementar estrategias pedagógicas antes, durante y después de éste. Las actividades antes y durante pretenden focalizar en los alumnos la atención, despertar su interés, activar el conocimiento previo, movilizar las procesos imaginativos y creativos, y promover la predicción.

Las estrategias para después de la lectura buscan facilitar la reconstrucción del significado global y específico del texto, así como el reconocimiento de su estructura organizativa.

Actividades para realizar antes y durante la lectura

Desde el mismo titulo del texto y de sus imágenes, se puede invitar a los alumnos a escribir o hablar sobre el posible contenido del texto; también se puede trabajar con los comentarios previos, por ejemplo, si se les va a leer un cuento sobre leones, antes de leerlo, se establece un diálogo con los niños sobre los leones, ¿qué saben sobre estos animales?, ¿dónde viven?, ¿qué comen?, entre otros. Otra actividad es la de leer pequeños comentarios sobre el texto, por ejemplo reseñas; además se pueden presentar videos alusivos al tema de la lectura.

En las actividades durante la lectura es recomendable suspender ésta e invitar al alumno a predecir en forma verbal o por escrito el final del texto. No se trata de solicitarles a los niños que den cuenta de lo comprendido hasta el momento.

Estrategias pedagógicas para después de la lectura

El propósito central de las estrategias para después de la lectura es habilitar a los alumnos para que den cuenta de lo que dice el texto y reconstruyan las redes conceptuales que habitan en él. En esta parte centraremos el análisis en aquellas estrategias que a nuestro modo de ver son más versátiles y eficaces para desarrollar la comprensión lectora.
La Técnica del Recuento: la técnica del recuento es una estrategia que facilita la reconstrucción del significado del texto. Después de leído el texto, se invita a los niños a hablar sobre lo que comprendieron, lo cual permite que expresen los resultados de su interacción con el texto.

A medida que los alumnos verbalizan, el profesor promueve la discusión sobre lo comprendido; esta es una de las estrategias más eficaces para lograr niveles superiores de comprensión sobre la realidad, sea ésta textual, física o social. La función del profesor es orientar adecuadamente la discusión, promoviéndola entre los participantes y no evitándola pues, en el caso de la comprensión lectora el fomento de la interacción y la confrontación de los diferentes puntos de vista conduce al alumno a descentrarse progresivamente de su propio punto de vista para tomar en cuenta el de los otros y acercarse cada vez más a la objetividad en la comprensión de lo leído.

La Relectura: la discusión sobre lo comprendido en la lectura posee sus limites, se llega a un punto en el cual cada participante de la discusión se aferra a su punto de vista sin ceder, cuando esto sucede la única salida es la relectura, o sea volver a leer el texto y verificar aquellos aspectos que no son claros.


Esta es una de las estrategias más potentes para mejorar la comprensión de la lectura, y con ella se logra reconstruir el significado de un texto. Es claro, además, que un texto de estudio debe leerse varias veces, para de esta manera dar cuenta sobre su contenido de forma cada vez más rigurosa. Al respecto Lerner, se pregunta: ¿Cómo ayudar al niño a comprender mejor lo que ha comprendido originalmente? La respuesta es muy simple: discutiendo y recorriendo al texto para aclarar dudas y superar los conflictos.

Sólo la relectura permite superar la lectura sensorial y realizar una lectura más conceptual. Luego de la primera relectura se repite el ciclo de discusión y relectura, tantas veces como sea necesario para comprender el texto.

El Parafraseo: otra estrategia para mejorar la comprensión de lectura es el parafraseo, es decir, que los alumnos escriban con sus propias palabras lo que comprendieron de un texto. El uso de un lenguaje propio permite observar el nivel de apropiación del significado del texto leído.

Como lo plantea Mc Neil: “cuanto más profundamente se procesa un texto –en términos de construir un modelo mental del mismo- mejor se comprenderá”, un modo de reconocer el nivel de profundidad del procesamiento es la capacidad del lector de evocar a través de una paráfrasis y no a través de una reproducción que intenta ser literal.
Las Redes Conceptuales: la ciencia trabaja con teorías para describir y explicar una realidad. La teoría está compuesta por conceptos, las cuales se relacionan de la forma que le dan sentido a la teoría.

Los conceptos se consignan en las textos con palabras, se trata entonces de que el lector aprenda y comprenda la manera como éstos se relacionan, lo que, requiere que discrimine en el texto, cuáles de ellos son principales y cuáles secundarios.

Este es el proceso de construcción de las redes conceptuales que permiten dar cuenta de lo que dice el texto; si se desea entrenar al lector especialmente a los de cursos superiores, o sea las de la educación básica secundaria, en el dominio de estas redes, es necesario hacerle comprender lo que significa un concepto y cómo puede ubicarlo en el texto, de manera que comprenda que si bien las conceptos se expresan a partir de palabras o conjuntos de éstas, no todos las palabras son conceptos; este ejercicio hay que realizarlo párrafo a párrafo hasta reconstruir la macro-estructura textual. Por ejemplo:
“La adecuación es la propiedad del texto que determina la variedad (dialectal-estándar) y el registro (general-especifico, oral-escrito, objetivo-subjetivo y formal-informal) que hay que usar. Los escritores competentes son adecuados y conocen los recursos lingüísticos, propios de cada situación, saben cuándo hay que utilizar el estándar y también dominan los diferentes registros de la lengua (por lo menos los más usuales y los que tienen que usar más o menudo)”.

En el análisis lo primero es ubicar los conceptos que posee el párrafo, es decir, adecuación, texto, variedad: dialectal y estándar, registro: general, especifico, oral, escrito, objetivo, subjetivo, formal e informal; escritores competentes, recursos lingüísticos y lengua.

Luego de la ubicación de los conceptos nos preguntamos por el significado de cada uno, y encontramos que unos conceptos son definidos en el texto y otros no, por ejemplo, en este caso el único definido es el de adecuación y están vagamente definidos las de variedad y registro. Después se ubican los conceptos principales y los que sirven de apoyo a éstos, para así construir la red conceptual. En este caso el concepto principal es el de adecuación, al rededor del cual giran variedad, registro y escritores competentes.

A su vez, al de variedad lo refuerzan los de dialectal y estándar; esta lectura continúa hasta reconstruir la lógica conceptual que habita en el texto y accede hasta su significado.

Es importante anotar que aquellas palabras que son conceptos en un contexto especifico no la son en otros; en el ejemplo anterior “registro” es un concepto, pero en la siguiente oración no lo es, al encontrarse en otro contexto: “El registro de las conductas de los niños”

Veamos otro ejemplo
“La adopción de un enfoque constructivista de la memoria y la elaboración de herramientas analíticas con las que inspeccionar y diseccionar la estructura del material escrito, han sido, sin duda, factores que posibilitaron que este fenómeno se produjera. Sobre estos objetivos se diseñaron en los años setenta diversos modelos de análisis estructurales de la prosa, de los que sobresalen los análisis preposicionales propuestos para estudio de textos narrativos y expositivos” Sigamos el procedimiento anteriormente mostrado. Primero ubicamos los conceptos del texto: enfoque constructivista de la memoria, herramientas analíticas, estructura del material escrito, modelos de análisis estructurales de la prosa, análisis preposicionales, textos narrativos y textos expositivos; es importante observar cómo los conceptos están compuestos por más de una palabra.

El segundo paso es delimitar el significado de cada uno de los conceptos y analizar cuáles de ellas son definidos en párrafos anteriores del texto; en el caso de no aparecer definidos, habría que hacerlo a partir del conocimiento previo o consultando otros libros.

El tercer paso consiste en construir la red conceptual, para la cual se debe precisar cuáles son los conceptos principales y cuáles los secundarios. En este caso el concepto principal no aparece explícitamente en el párrafo pues los podríamos señalar como centrales: enfoque constructivo de la memoria, herramientas analíticas y modelos de análisis de la estructura de la prosa; se subordinan al de comprensión lectora que es el concepto principal. Esto nos permite afirmar que el texto hay que entenderlo como una unidad indivisible y que por tanto el análisis de un párrafo debe considerar los anteriores. Pues no se trata de comprender un fragmento aislado sino una totalidad.

Es importante aclarar que si bien el entrenamiento en la elaboración de redes conceptuales facilita lo comprensión textual, éstas deben ser armados primero en la mente, es decir, que la elaboración de redes es más un proceso cognitivo que gráfico-perceptivo.

Existen, además, otro tipo de estrategias que contribuyen a mejorar la comprensión lectora, tales como la de estructurar un texto a partir de párrafos presentados desordenadamente; organizar párrafos o partir de oraciones o técnicas de completación, en las cuales se presentan oraciones incompletas para que los alumnos las terminen, como por ejemplo: María se lava los ______, Pedro da un puntapié al___________.

También es importante considerar otros procedimientos como la dramatización, el resumen o los cuadros sinópticos. Igualmente tenemos las estrategias metacognoscitivas como una eficaz forma de cualificar la comprensión textual.

Veamos algunos programas de entrenamiento cognitivo aplicados a la comprensión de la lectura.

Estrategias metacognoscitivas para mejorar la comprensión lectora

La metacognición en el campo de la lectura consiste en tomar conciencia del propio proceso de lectura de manera que el lector pueda supervisar y controlar su interacción con el texto, darse cuenta qué partes no comprende y por qué y, además, saber cómo resolver estas dificultades.

En relación con la comprensión lectora podemos, según Baker y Brown, distinguir dos componentes metacognoscitivos; el primero está relacionado con la habilidad para reflexionar sobre el propio proceso de comprensión e incluye el conocimiento que el lector tiene de sus habilidades y recursos en función de la naturaleza de los materiales de lectura y de las demandas de la tarea, así por ejemplo, puede ser consciente de que si no se entiende alguna parte del texto, puede devolverse y releerla o avanzar en la lectura para deducir el significado por el contacto.

Sin embargo, es importante anotar que la conciencia de estas estrategias no asegura que el lector se haga más activo durante el proceso de lectura, de ahí la importancia del control por parte del docente.

El segundo componente de la metacognición es la función ejecutiva o procesos de orden superior los cuales coordinan y dirigen otras actividades e incluyen labores de evaluación, planificación y regulación.

Las investigaciones recientes en el campo de la metacognición muestran que los lectores deficientes tienen limitaciones para responsabilizarse de sus propios procesos cognitivos durante el proceso lector la cual se observa en el desconocimiento del propósito de la lectura y las estrategias lectoras, si como la dificultad para supervisar su proceso de construcción de significados.

A continuación presentaremos algunas de las estrategias metacognoscitivas recopiladas por Mateos y que son las más utilizadas para el mejoramiento de la comprensión lectora, las cuales poseen los siguientes principios comu Algunas estrategias cognoscitivas para facilitar la comprensión textual

A continuación presentaremos algunos elementos teóricos para la comprensión lectora, esencialmente ciertos criterios y estrategias básicas que facilitan la reconstrucción del significado global y específico de un texto. No es nuestro propósito realizar una presentación exhaustiva, sino más bien señalar algunas estrategias modelo.
El primer principio que es necesario tener en cuenta para desarrollar la comprensión lectora es no fragmentar el texto ni el proceso lector para no caer en la ilusión de que al desarrollar destrezas aisladas en el lector, éste las integra en su proceso de lectura.

Las destrezas necesarias para desarrollar la comprensión lectora deben promoverse en el mismo proceso de lectura. Pero también es necesario implementar estrategias pedagógicas antes, durante y después de éste. Las actividades antes y durante pretenden focalizar en los alumnos la atención, despertar su interés, activar el conocimiento previo, movilizar las procesos imaginativos y creativos, y promover la predicción.

Las estrategias para después de la lectura buscan facilitar la reconstrucción del significado global y específico del texto, así como el reconocimiento de su estructura organizativa.

Actividades para realizar antes y durante la lectura

Desde el mismo titulo del texto y de sus imágenes, se puede invitar a los alumnos a escribir o hablar sobre el posible contenido del texto; también se puede trabajar con los comentarios previos, por ejemplo, si se les va a leer un cuento sobre leones, antes de leerlo, se establece un diálogo con los niños sobre los leones, ¿qué saben sobre estos animales?, ¿dónde viven?, ¿qué comen?, entre otros. Otra actividad es la de leer pequeños comentarios sobre el texto, por ejemplo reseñas; además se pueden presentar videos alusivos al tema de la lectura.

En las actividades durante la lectura es recomendable suspender ésta e invitar al alumno a predecir en forma verbal o por escrito el final del texto. No se trata de solicitarles a los niños que den cuenta de lo comprendido hasta el momento.

Estrategias pedagógicas para después de la lectura

El propósito central de las estrategias para después de la lectura es habilitar a los alumnos para que den cuenta de lo que dice el texto y reconstruyan las redes conceptuales que habitan en él. En esta parte centraremos el análisis en aquellas estrategias que a nuestro modo de ver son más versátiles y eficaces para desarrollar la comprensión lectora.
La Técnica del Recuento: la técnica del recuento es una estrategia que facilita la reconstrucción del significado del texto. Después de leído el texto, se invita a los niños a hablar sobre lo que comprendieron, lo cual permite que expresen los resultados de su interacción con el texto.

A medida que los alumnos verbalizan, el profesor promueve la discusión sobre lo comprendido; esta es una de las estrategias más eficaces para lograr niveles superiores de comprensión sobre la realidad, sea ésta textual, física o social. La función del profesor es orientar adecuadamente la discusión, promoviéndola entre los participantes y no evitándola pues, en el caso de la comprensión lectora el fomento de la interacción y la confrontación de los diferentes puntos de vista conduce al alumno a descentrarse progresivamente de su propio punto de vista para tomar en cuenta el de los otros y acercarse cada vez más a la objetividad en la comprensión de lo leído.

La Relectura: la discusión sobre lo comprendido en la lectura posee sus limites, se llega a un punto en el cual cada participante de la discusión se aferra a su punto de vista sin ceder, cuando esto sucede la única salida es la relectura, o sea volver a leer el texto y verificar aquellos aspectos que no son claros.


Esta es una de las estrategias más potentes para mejorar la comprensión de la lectura, y con ella se logra reconstruir el significado de un texto. Es claro, además, que un texto de estudio debe leerse varias veces, para de esta manera dar cuenta sobre su contenido de forma cada vez más rigurosa. Al respecto Lerner, se pregunta: ¿Cómo ayudar al niño a comprender mejor lo que ha comprendido originalmente? La respuesta es muy simple: discutiendo y recorriendo al texto para aclarar dudas y superar los conflictos.

Sólo la relectura permite superar la lectura sensorial y realizar una lectura más conceptual. Luego de la primera relectura se repite el ciclo de discusión y relectura, tantas veces como sea necesario para comprender el texto.

El Parafraseo: otra estrategia para mejorar la comprensión de lectura es el parafraseo, es decir, que los alumnos escriban con sus propias palabras lo que comprendieron de un texto. El uso de un lenguaje propio permite observar el nivel de apropiación del significado del texto leído.

Como lo plantea Mc Neil: “cuanto más profundamente se procesa un texto –en términos de construir un modelo mental del mismo- mejor se comprenderá”, un modo de reconocer el nivel de profundidad del procesamiento es la capacidad del lector de evocar a través de una paráfrasis y no a través de una reproducción que intenta ser literal.
Las Redes Conceptuales: la ciencia trabaja con teorías para describir y explicar una realidad. La teoría está compuesta por conceptos, las cuales se relacionan de la forma que le dan sentido a la teoría.

Los conceptos se consignan en las textos con palabras, se trata entonces de que el lector aprenda y comprenda la manera como éstos se relacionan, lo que, requiere que discrimine en el texto, cuáles de ellos son principales y cuáles secundarios.

Este es el proceso de construcción de las redes conceptuales que permiten dar cuenta de lo que dice el texto; si se desea entrenar al lector especialmente a los de cursos superiores, o sea las de la educación básica secundaria, en el dominio de estas redes, es necesario hacerle comprender lo que significa un concepto y cómo puede ubicarlo en el texto, de manera que comprenda que si bien las conceptos se expresan a partir de palabras o conjuntos de éstas, no todos las palabras son conceptos; este ejercicio hay que realizarlo párrafo a párrafo hasta reconstruir la macro-estructura textual. Por ejemplo:
“La adecuación es la propiedad del texto que determina la variedad (dialectal-estándar) y el registro (general-especifico, oral-escrito, objetivo-subjetivo y formal-informal) que hay que usar. Los escritores competentes son adecuados y conocen los recursos lingüísticos, propios de cada situación, saben cuándo hay que utilizar el estándar y también dominan los diferentes registros de la lengua (por lo menos los más usuales y los que tienen que usar más o menudo)”.

En el análisis lo primero es ubicar los conceptos que posee el párrafo, es decir, adecuación, texto, variedad: dialectal y estándar, registro: general, especifico, oral, escrito, objetivo, subjetivo, formal e informal; escritores competentes, recursos lingüísticos y lengua.

Luego de la ubicación de los conceptos nos preguntamos por el significado de cada uno, y encontramos que unos conceptos son definidos en el texto y otros no, por ejemplo, en este caso el único definido es el de adecuación y están vagamente definidos las de variedad y registro. Después se ubican los conceptos principales y los que sirven de apoyo a éstos, para así construir la red conceptual. En este caso el concepto principal es el de adecuación, al rededor del cual giran variedad, registro y escritores competentes.

A su vez, al de variedad lo refuerzan los de dialectal y estándar; esta lectura continúa hasta reconstruir la lógica conceptual que habita en el texto y accede hasta su significado.

Es importante anotar que aquellas palabras que son conceptos en un contexto especifico no la son en otros; en el ejemplo anterior “registro” es un concepto, pero en la siguiente oración no lo es, al encontrarse en otro contexto: “El registro de las conductas de los niños”

Veamos otro ejemplo
“La adopción de un enfoque constructivista de la memoria y la elaboración de herramientas analíticas con las que inspeccionar y diseccionar la estructura del material escrito, han sido, sin duda, factores que posibilitaron que este fenómeno se produjera. Sobre estos objetivos se diseñaron en los años setenta diversos modelos de análisis estructurales de la prosa, de los que sobresalen los análisis preposicionales propuestos para estudio de textos narrativos y expositivos” Sigamos el procedimiento anteriormente mostrado. Primero ubicamos los conceptos del texto: enfoque constructivista de la memoria, herramientas analíticas, estructura del material escrito, modelos de análisis estructurales de la prosa, análisis preposicionales, textos narrativos y textos expositivos; es importante observar cómo los conceptos están compuestos por más de una palabra.

El segundo paso es delimitar el significado de cada uno de los conceptos y analizar cuáles de ellas son definidos en párrafos anteriores del texto; en el caso de no aparecer definidos, habría que hacerlo a partir del conocimiento previo o consultando otros libros.

El tercer paso consiste en construir la red conceptual, para la cual se debe precisar cuáles son los conceptos principales y cuáles los secundarios. En este caso el concepto principal no aparece explícitamente en el párrafo pues los podríamos señalar como centrales: enfoque constructivo de la memoria, herramientas analíticas y modelos de análisis de la estructura de la prosa; se subordinan al de comprensión lectora que es el concepto principal. Esto nos permite afirmar que el texto hay que entenderlo como una unidad indivisible y que por tanto el análisis de un párrafo debe considerar los anteriores. Pues no se trata de comprender un fragmento aislado sino una totalidad.

Es importante aclarar que si bien el entrenamiento en la elaboración de redes conceptuales facilita lo comprensión textual, éstas deben ser armados primero en la mente, es decir, que la elaboración de redes es más un proceso cognitivo que gráfico-perceptivo.

Existen, además, otro tipo de estrategias que contribuyen a mejorar la comprensión lectora, tales como la de estructurar un texto a partir de párrafos presentados desordenadamente; organizar párrafos o partir de oraciones o técnicas de completación, en las cuales se presentan oraciones incompletas para que los alumnos las terminen, como por ejemplo: María se lava los ______, Pedro da un puntapié al___________.

También es importante considerar otros procedimientos como la dramatización, el resumen o los cuadros sinópticos. Igualmente tenemos las estrategias metacognoscitivas como una eficaz forma de cualificar la comprensión textual.

Veamos algunos programas de entrenamiento cognitivo aplicados a la comprensión de la lectura.

Estrategias metacognoscitivas para mejorar la comprensión lectora

La metacognición en el campo de la lectura consiste en tomar conciencia del propio proceso de lectura de manera que el lector pueda supervisar y controlar su interacción con el texto, darse cuenta qué partes no comprende y por qué y, además, saber cómo resolver estas dificultades.

En relación con la comprensión lectora podemos, según Baker y Brown, distinguir dos componentes metacognoscitivos; el primero está relacionado con la habilidad para reflexionar sobre el propio proceso de comprensión e incluye el conocimiento que el lector tiene de sus habilidades y recursos en función de la naturaleza de los materiales de lectura y de las demandas de la tarea, así por ejemplo, puede ser consciente de que si no se entiende alguna parte del texto, puede devolverse y releerla o avanzar en la lectura para deducir el significado por el contacto.

Sin embargo, es importante anotar que la conciencia de estas estrategias no asegura que el lector se haga más activo durante el proceso de lectura, de ahí la importancia del control por parte del docente.

El segundo componente de la metacognición es la función ejecutiva o procesos de orden superior los cuales coordinan y dirigen otras actividades e incluyen labores de evaluación, planificación y regulación.

Las investigaciones recientes en el campo de la metacognición muestran que los lectores deficientes tienen limitaciones para responsabilizarse de sus propios procesos cognitivos durante el proceso lector la cual se observa en el desconocimiento del propósito de la lectura y las estrategias lectoras, si como la dificultad para supervisar su proceso de construcción de significados.

A continuación presentaremos algunas de las estrategias metacognoscitivas recopiladas por Mateos y que son las más utilizadas para el mejoramiento de la comprensión lectora, las cuales poseen los siguientes principios comunes. Por ejemplo, en todas ellas se brinda información sobre las estrategias y se entrena directamente en la comprensión. Igualmente en todas ellas se presentan los procedimientos de enseñanza empleados.

Las prácticas de entrenamiento se realizan con la participación de expertos y novatos en ellas, los primeros diseñan las estrategias y a la vez orientan la actividad intelectual de los niños durante el proceso, luego retiran poco a poco su apoyo hasta que los aprendices controlen la estrategia utilizada.

Estrategias para el aprendizaje de información

Este programa es desarrollado con el propósito de fomentar el conocimiento de diferentes estrategias vinculadas con la comprensión lectora, para lo cual brindan información acerca de los aspectos declarativos, procedimentales y conclusionales de las mismas.

El programa está dividido en tres fases de una duración aproximada de cinco a seis semanas cada una: la primera se dirige a la enseñanza de aspectos generales como propósitos de lectura, planes y estrategias; la segunda comprende el conocimiento de estrategias específicas relacionadas con la construcción e identificación del significado del todo (por ejemplo la activación del conocimiento previo, la elaboración, el resumen, la inferencia y la identificación de ideas principales); la tercera se orienta a la enseñanza de estrategias para evaluar y regular la propia lectura, tales como la relectura y el auto cuestionamiento.

La instrucción incluye la explicación de la estrategia, el uso de metáforas, los diálogos entre los alumnos y el profesor, la práctica dirigida y la extensión de las estrategias a distintas áreas del contenido.

Cada sesión de trabajo inicia con una metáfora de la estrategia y una reflexión sobre su relación con la lectura y la que de ella se deriva sobre la forma de leer, por ejemplo: planificar un viaje es como planificar la lectura de un texto. En ambos casos necesitamos saber nuestro destino antes de empezar, contar con un buen mapa y observar nuestro progreso y velocidad a lo largo del camino (Mateos, 1995:331).

Luego de la introducción a la estrategia, el profesor presenta al mismo tiempo cómo y cuándo aplicarla, enseguida los alumnos la practican y sólo cuando posean dudas consultan a los compañeros o al profesor.

En las primeras sesiones de práctica, las metáforas se incluyen en las textos como claves para señalar ocasiones en las que es adecuado el empleo de las estrategias; por ejemplo, se utilizan diferentes señales de traficó como parada, precaución, entre otras, para indicar que hay que supervisar la comprensión alcanzada y utilizar entonces el parafraseo, definir la velocidad de la lectura o releer el texto.

La instrucción finaliza con la socialización de los logros y dificultades de los alumnos con la estrategia utilizada. Para permitir una mayor apropiación de la estrategia se utilizan varias sesiones para aplicarla en textos científicos y sociales.

Pueden ser componentes curriculares correspondientes a este eje las estrategias de comprensión lectora y producción escrita, el desarrollo de procesos como la descripción, la síntesis, la comparación, el desarrollo del pensamiento estructural y relacional, la clasificación, la definición, el análisis, la elaboración de hipótesis, entre otros, y demás competencias del pensamiento asociadas con la comunicación y la significación. Estos procesos pueden ser trabajados tanto a nivel oral como escrito.

En esta medida la formulación del fin nos proyecta hacia un estado ideal en relación con el desarrollo de las competencia de la lectura y la escritura en los estudiantes y la vinculación activa de la escuela con la biblioteca pública, permitiendo la construcción de un norte a todas la intervenciones futuras, que le proyecto es sólo una de ellas.nes. Por ejemplo, en todas ellas se brinda información sobre las estrategias y se entrena directamente en la comprensión. Igualmente en todas ellas se presentan los procedimientos de enseñanza empleados.

Las prácticas de entrenamiento se realizan con la participación de expertos y novatos en ellas, los primeros diseñan las estrategias y a la vez orientan la actividad intelectual de los niños durante el proceso, luego retiran poco a poco su apoyo hasta que los aprendices controlen la estrategia utilizada.

Estrategias para el aprendizaje de información

Este programa es desarrollado con el propósito de fomentar el conocimiento de diferentes estrategias vinculadas con la comprensión lectora, para lo cual brindan información acerca de los aspectos declarativos, procedimentales y conclusionales de las mismas.

El programa está dividido en tres fases de una duración aproximada de cinco a seis semanas cada una: la primera se dirige a la enseñanza de aspectos generales como propósitos de lectura, planes y estrategias; la segunda comprende el conocimiento de estrategias específicas relacionadas con la construcción e identificación del significado del todo (por ejemplo la activación del conocimiento previo, la elaboración, el resumen, la inferencia y la identificación de ideas principales); la tercera se orienta a la enseñanza de estrategias para evaluar y regular la propia lectura, tales como la relectura y el auto cuestionamiento.

La instrucción incluye la explicación de la estrategia, el uso de metáforas, los diálogos entre los alumnos y el profesor, la práctica dirigida y la extensión de las estrategias a distintas áreas del contenido.

Cada sesión de trabajo inicia con una metáfora de la estrategia y una reflexión sobre su relación con la lectura y la que de ella se deriva sobre la forma de leer, por ejemplo: planificar un viaje es como planificar la lectura de un texto. En ambos casos necesitamos saber nuestro destino antes de empezar, contar con un buen mapa y observar nuestro progreso y velocidad a lo largo del camino (Mateos, 1995:331).

Luego de la introducción a la estrategia, el profesor presenta al mismo tiempo cómo y cuándo aplicarla, enseguida los alumnos la practican y sólo cuando posean dudas consultan a los compañeros o al profesor.

En las primeras sesiones de práctica, las metáforas se incluyen en las textos como claves para señalar ocasiones en las que es adecuado el empleo de las estrategias; por ejemplo, se utilizan diferentes señales de traficó como parada, precaución, entre otras, para indicar que hay que supervisar la comprensión alcanzada y utilizar entonces el parafraseo, definir la velocidad de la lectura o releer el texto.
La instrucción finaliza con la socialización de los logros y dificultades de los alumnos con la estrategia utilizada. Para permitir una mayor apropiación de la estrategia se utilizan varias sesiones para aplicarla en textos científicos y sociales.

Pueden ser componentes curriculares correspondientes a este eje las estrategias de comprensión lectora y producción escrita, el desarrollo de procesos como la descripción, la síntesis, la comparación, el desarrollo del pensamiento estructural y relacional, la clasificación, la definición, el análisis, la elaboración de hipótesis, entre otros, y demás competencias del pensamiento asociadas con la comunicación y la significación. Estos procesos pueden ser trabajados tanto a nivel oral como escrito.

En esta medida la formulación del fin nos proyecta hacia un estado ideal en relación con el desarrollo de las competencia de la lectura y la escritura en los estudiantes y la vinculación activa de la escuela con la biblioteca pública, permitiendo la construcción de un norte a todas la intervenciones futuras, que le proyecto es sólo una de ellas.

jueves, 28 de octubre de 2010

EL MUNDO DE LA CIBERNÉTICA PEDAGÓGICA

En un colegio del Maiceo, se encantaban unos maestros con ganas de innovar en su práctica pedagógica y se preguntaron cuál sería la estrategia didáctica o metodología pedagógica que permitiera mejorar el proceso enseñanza-aprendizaje de sus estudiantes, uno de ellos Santiago el más joven, planteo que el mejor mecanismos para mejorar la educación del siglo XXI, es la Educación virtual, -educación virtual replicaron los más entrados en edad, - unos en tonos de burlas dijeron y con que se come eso, Santiago, que ya estaba estudiando algo relacionado con el tema se coloco de pie, aunque con un poco de nervios pero lo hizo les explicó a sus compañeros que la educación moderna se debe alternar con la tecnología, - pero nosotros nos da miedo hasta prender el computador, no se preocupe asentó el joven. Les explicare, detenidamente, la educación centra su trabajo en la enseñanza de temas o contenidos, pero en estos tiempo se hace necesario hacer énfasis en el aprendizaje de los jóvenes y esto es un tarea que debemos debatir en próximas reuniones.
Queridos compañeros, para ninguno de nosotros es un secreto que los tiempos traen consigo nuevos retos, problemas u oprtunidades, el de la educación del siglo XXI, es como se articula la educación en un mundo tan cambiante como el muestro donde la tecnologías es la herramienta que facilita los procesos y por consecuancia la vida al hombre, -todo los presentes escuchaban con atención las palabras del muchacho, para ello se debe articular de manera creativa la tecnología educativa a la globalización y hacer que la educación, le abras espacios a los estudiantes en el mundo digital. – Santiago, no sabía de donde salían tantas palabras bonitas pero los tenía con la boca abierta. –literalmente-.
Continúo hablando pausado pero seguro, la educación del siglo XXI, está basada en los procesos de tecnologización, -levanto la mano el profesor Arcadio, eso que es- con un tono alto, esto es como la utilización de las tics, se aplican al campo de la educación, a través, de aplicaciones necnificadas y la investigación tecnológica, permitiendo la comunicación sincrónica (CMC) y asincrónica. –los presente seguían sin entender pero escuchaban detenidamente las palbras de santiago-, para la aplicación de estos medios a la realidad del joven nosotros los maestros debemos abrirnos al campo de la tecnología, entonces se debe actualizar desde el PEI, los planes de áreas, y demás disposiciones legales dispuestas en el marco de legislación educativa vigente, insertar políticas que permitan colaborar con el aprendizaje de los estudiantes.

Estos proceso de innovación, permiten a un estudiante capacitado para enfrentar el mundo globalizado, pero sobre todo capacitado para servir a la sociedad que lo rodea. Estoy seguro que las preguntas que les asaltan atraves de mi discurso tienen respuestas lógicas solo hay que atreverse y verán como nuestra institución se convierte en vanguardia de estos proceso, no de manera ajena al contexto educativo sino desde la planeación estratégica de las áreas, y desde las practicas educativas en el salón de clase.

La globalización es una realidad que no podemos desconocer aunque fuimos educados en una educación tradicional, que no fue mala pero, es hora de abrirnos a los diferentes tendencias pedagógicas contemporáneas y hacer uso de las TICS, para mejor el proceso de aprendizaje de los chicos, - correcto dijo Delfina que lo miraba atónita pero convencida de las palabras de su compañero porque siempre hacia aportes claros para la institución. Y su explicación tenia asidero en el colectivo lo notaba en los gestos-.
Cada uno de los elementos mencionados se deben aplicar desde los contextos políticos, culturales y sociales en que se encuentra enmarcada nuestra población, y nuestra comunidad educativa.

Esto con el fin de crear nuevas tecnologías educativas, que permita facilitar y acercar al estudiante al conocimiento, basado en modelos de competencia. Cada uno de ellas es una rueda que permite el engranaje sustentado en la práctica de nuevas metodologías de aprendizaje, permitiendo el aprendizaje significativo, la colaboración la autoformación y pertinencia de nuestro modelo pedagógico.
Las palabas de Santiago parecía abrir una ventana que comunicaba al más allá, todos tenían caras de espantos, el silencio se apoderó del recinto nadie se atrevía interpelar las palabras del profesor.
Esto es solo una ruta que bien dirigida permitirá una respuesta efusiva en la población de estudiante, puesto la implementación de las TICS, están abiertas a las nuevas perspectivas metodológicas de la enseñanza puesto con ello se garantiza, el cumplimiento del artículo tercero del Decreto 1290/2009, que deben hacer realidad todos los SIIES, de las instituciones educativas. Que es respetar los estilos de aprendizaje, mejorando los procesos la organización, la selección e los contenidos temáticos, la sistematización de la evolución y los métodos de motivación de los estudiantes. Que avanzaran de acuerdo a los ritmos de aprendizaje, sin salirnos de la normatividad vigente.
-La hora de trabajo había terminado hace rato pero die se sentía con el derecho de decir que se terminaba la jornada laboral-. Todos los maestros se comprometieron a esperar la capacitación del profesor Santiago, para implementar el uso de las TICS, en la institución el próximo año.

Alveiro Machado Pérez
Lic: En educación con énfasis
en Lengua Castellana

miércoles, 27 de octubre de 2010

taller de entrada

INSTITUCIÓN EDUCATIVA NÚMERO DIEZ
SEDE: RODOLFO MORALES
EVALUACIÓN DE LENGUA CASTELLANA

Docente
Alveiro Machado Pérez
ESTUDIANTE__________________________________________ OCTAVO_____
Lee el fragmento de Maria y responde las siguientes preguntas
IV
Dormí tranquilo, como cuando me adormecía en la niñez uno de los maravillosos cuentos del esclavo Pedro.
Soñé que María entraba a renovar las flores de mi mesa, y que al salir había rozado las cortinas de mi lecho con su falda de muselina vaporosa salpicada de florecillas azules.
Cuando desperté, las aves cantaban revoloteando en los follajes de los naranjos y pomarrosos, y los azahares llenaron mi estancia con su aroma tan luego como entreabrí la puerta.
La voz de María llegó entonces a mis oídos dulce y pura: era su voz de niña, pero más grave y lista ya para prestarse a todas las modulaciones de la ternura y de la pasión. ¡Ay! ¡Cuántas veces, en mis sueños, un eco de ese mismo acento ha llegado después a mi alma, y mis ojos han buscado en vano aquel huerto donde tan bella la vi en aquella mañana de agosto!
La niña cuyas inocentes caricias habían sido todas para mí, no sería ya la compañera de mis juegos; pero en las tardes doradas del verano estaría en los paseos a mi lado, en medio del grupo de mis hermanas; le ayudaría yo a cultivar sus flores predilectas; en las veladas oiría su voz, me mirarían sus ojos, nos separaría un solo paso.
Luego que me hube arreglado ligeramente los vestidos, abrí la ventana y divisé a María en una de las calles del jardín, acompa¬ñada de Emma: llevaba un traje más oscuro que el de la víspera, y el pañolón color de púrpura, enlazado a la cintura, le caía en forma de banda sobre la falda; su larga cabellera, dividida en dos crenchas, ocultábale a medias parte de la espalda y pecho: ella y mi hermana tenían descalzos los pies. Llevaba una vasija de porcelana poco más blanca que los brazos que la sostenían, la que iba llenando de rosas abiertas durante la noche, desechando por marchitas las menos húmedas y lozanas. Ella, riendo con su compañera, hundía las mejillas, más frescas que las rosas, en el tazón rebosante. Descubrióme Emma: María lo notó, y sin volverse hacia mí, cayó de rodillas para ocultarme sus pies, desatóse del talle el pañolón, y cubriéndose con él los hombros, fingía jugar con las flores. Las hijas núbiles de los patriarcas no fueron más hermosas en las alboradas en que recogían flores para sus alta¬res.
Jorge Isaacs (colombiano


1 La novela Maria se sitúa en el periodo del:
a. costumbrismo
b. neoclasicismo
c. romanticismo
d. realismo

2. el contexto del fragmento, Maria y Efraín son:
a. amigos de infancia
b. el amor platónico de Efraín
c. novios
d. amantes



3. en el texto la palabra azahares hace referencia a:
a. un jarrón fino
b. un vestido de color púrpura
c. una colonia importada
d. una flor de naranjo

4. En el texto la expresión “¡Ay! ¿Cuántas veces es mi sueño un eco de ese mismo acento ha llegado después a mia alma!”. da entender :
a. el amor de Maria por Efraín
b. el recuerdo de Maria
c. la visión parejera de del amor
d. un recuerdo del amor platónico

5. en el texto la expresión crenchas da entender:
a. el color de la piel
b. los mechones de su pelo
c. un manto largo
d. una vasija de color blanco


6. la estructura de un texto de interés general es:
a. inicio, nudo y conclusión
b. introducción, nudo y desenlace
c. introducción, desenlace y desarrollo
d. introducción desarrollo y conclusión

7. el fragmento de María es un texto:
a. expositivo
b. narrativo
c. analítico
d. argumentativo


8. explique que cuales con las principales característica de la literatura del romanticismo. ___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

9. ¿Que diferencias hay entre eufemismo y temas tabú?, da ejemplos:______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

10. ¿Qué relación hay entre romanticismo y costumbrismo? ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________
Marca con una X las características correctas de la literatura del romanticismo:
A) Amor por el prójimo ____
B) egocentrismo ____
C) proyección a la vida ____
D) sentimiento efímero ____
E) liberalismo ____
F) idealismo ____
G) lirismo ____
H) sentimental ____
I) angustia metafísica ____
J) Propensión al silencio ____
K) Liberalismo en lo político ___
L) propensión a la fuga ______

evaluación de octavo